viernes, 2 de agosto de 2019

'La luz del Oriente' (2000).- Como novela histórica está muy bien, la verdad. Esta mañana he acabado de leer este libro del escritor español Jesús Sánchez Adalid y he de decir que me ha impresionado, puesto que NO hay la menor duda --pienso-- de que este escritor está muy bien documentado sobre la época del Imperio Romano y la Crisis que sufrió en el Siglo III, la cuál lo llevó hacia su caída.

Ahora bien, aunque --a mi entender-- la novela logra “enganchar” a cualquier lector, NO deja de plasmarse en ella el trasfondo religioso en orden al cristianismo y lo que significó en aquella época. Este trasfondo religioso, que además nos lleva a reflexionar sobre las creencias o el sentido espiritual del cristianismo, se debe --pienso yo-- a la propia condición y ocupación del autor, quien es, además de escritor, sacerdote católico, párroco de la Parroquia de San José (Mérida), Canónigo del Cabildo de la Catedral Metropolitana de Mérida y delegado episcopal en la Pastoral Universitaria.

Aún así y pese a que yo NO comulgo con el cristianismo ni con NINGUNA otra religión, la lectura de 'La luz del Oriente' de Jesús Sánchez Adalid ha llegado a cautivarme sinceramente. Novela muy recomendable, especialmente para los amantes de la historia. (Marin El Punki – Perro Loko).

El profesor de Física y Química me dijo que le hablara de los gases nobles y entonces le conté lo siguiente:
- "Los gases nobles implican la existencia de gases campesinos y eventualmente un derrocamiento de todo el sistema de gas."

...La verdad es que a día de hoy todavía me estoy preguntando por qué me suspendió.
Esta mañana me dijo un amigo mío:
- "Compadre, me encanta que mis hijos me entierren en la arena de la playa, pero a veces me da la impresión de que están practicando para algo." (?)
HABILIDADES DE SUPERVIVENCIA:
- Regla número 103: puedes beber tu propio pipí para sobrevivir. Así que siempre ten una botella vacía en tu bolso. Por si acaso.
Me gustaría disculparme con todos mis compañeros de la oficina. Me rocié con un exceso de perfume y colonia... Ustedes tuvieron que abandonar vuestros puestos de trabajo y a mí me entró mareo y un fuerte dolor de cabeza...