Una vez fui, como representante de los
trabajadores, a un evento de reconocimiento por el auge de la
empresa. Así que cuando a mi jefe le tocó dar el discurso, salió y
dijo: «detrás de cada hombre exitoso hay una gran mujer». Luego,
llamó a su esposa y todo el mundo rompió el silencio en un intenso
y caluroso aplauso.
Aprendí esto de mi jefe y a
continuación, me tocó dar el discurso a mí. Yo aún NO estoy
casado, así que dije «detrás de cada hombre exitoso hay una gran
mujer» y entonces llamé a su esposa.
Todo el mundo empezó a gritar y se
armó la zapatiesta padre. A mí NO tardaron en despedirme y a día
de hoy todavía me estoy preguntando qué fue lo que hice mal. (?).
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