Si nos ponemos a analizar el perfil de
la juventud de hoy día con el de hace veinte, treinta o cuarenta
años [perfil cultural, social, ideológico,...], evidentemente ha
habido una evolución, un cambio. NO es igual el joven de antes (el
de los años '80, por ejemplo), que el de ahora. Puede que la
rebeldía todavía siga caracterizando a l@s más jóvenes, pero este
aspecto siempre existido a lo largo de la historia; la juventud
siempre ha sido rebelde.
Ahora bien, lo que NO puedo es
determinar hasta qué punto ha cambiado el joven de hoy día con
respecto al que había antes, ni tampoco puedo decir si ese cambio ha
sido para mejor o para todo lo contrario,... NO soy nadie para juzgar
a la juventud; entre otras cosas, porque yo también soy joven y me
siento joven.
Tampoco, creo yo, hay que ser tan
catastrofista y decir que se ha llegado a una deshumanización de la
juventud y a una pérdida total de valores, como mucha gente suele
afirmar por ahí; porque, por otro lado, también se escuchan
comentarios como: “tenemos la juventud mejor preparada de todos los
tiempos”. O sea, que todo NO va a ser tan negativo ¿no?.
Yo NO voy a entrar en detalles sobre
hacia dónde ha ido evolucionando la juventud. Lo que sí realmente
me interesa es saber cómo y de qué forma ha influenciado en ella
las industrias culturales (radio, televisión, prensa, móvil,
Internet,...) . NO hay que ser muy listo, para saber que detrás de
la transformación de la juventud hasta convertirse en la que tenemos
ahora, hay unas directrices impuestas por el sistema establecido.
Aquí es donde tenemos que empezar a preocuparnos.
Existen determinados contenidos que las
élites mundiales (los gobiernos, los que ostentan el poder)
transmiten a la juventud, muchas veces incluso hasta de manera
subliminal. Los debates interesantes de televisión los echan a las
tantas de la noche, cuando el personal ya NO se encuentra tan
receptivo, por NO decir “medio dormido”, mientras que los
'realitys shows' los ponen prácticamente durante todo el día. Es
decir, hay una intencionalidad, además del negocio que intentan
hacer las empresas televisivas.
Igualmente, hay cantidad de contenidos,
de información, de temas didácticos,... Todo está a nuestra
disposición a través de las redes digitales. El problema es que NO
sabemos qué hacer con todo eso, ni si toda esa información es
realmente cierta. ¿Cuántas veces hemos leído noticias falsas a
través de Internet?
En el sistema educativo, el niño tiene
más asignaturas que antes, o por lo menos son distintas. Algunos dan
hasta 'tecnología', 'educación cívica', 'humanidades',... Estas
asignaturas, que yo sepa, NO las conocíamos antes. Está bien que
los jóvenes adquieran aprendizaje. El problema es que muchas de las
cosas que aprenden, luego NO les sirven para integrarse en el mercado
laboral. Entonces, cuando acaban una carrera, tienen que seguir
formándose realizando costosos cursos que sí les puedan servir para
trabajar. Hay por tanto un desajuste abismal entre el sistema
educativo y el mundo laboral, pese a que éste se encuentra ya
bastante deteriorado.
¿Qué hacer con respecto a las
situaciones difíciles que acabo de explicar?.- Bueno, pues yo creo
que es la juventud quien tiene que tomar las riendas y decidir hacia
dónde quiere dirigirse.
Miren ustedes, el otro día sin ir más
lejos, estuve viendo una serie y mira que yo veo poco la tele, pero
estaba comiendo y en ese momento la estaban echando. NO me preguntéis
cómo se llamaba la serie porque NO lo sé, ya os digo que NO suelo
ver mucho la tele. Era española, pero bueno... Lo cierto es que,
fíjense cómo es la cosa que sus protagonistas principales --los
cuáles se supone que deben ser “los buenos”-- aparecieron
metiéndose rayas de coca. Hombre, por Diox, eso NO se veía
antes!!!. A ver, yo mismo era un seguidor acérrimo de la serie de
“Curro Jiménez” y allí se daban navajazos, pero hay una
diferencia: que la serie transmitía unos valores. Sin embargo, ¿qué
clase de valores puede inculcar una serie donde sus protagonistas
principales se meten rayas de coca?. Eso lo ve cualquier niño y
puede pensar: “ya mismo estoy haciendo yo lo mismo”. ¿Pues, NO
quitaron los anuncios del tabaco de los campos de fútbol cuando
transmitían un partido??. Pues que hagan lo mismo con los disparates
que suelen verse en la televisión!!!.
Por eso digo yo que es la juventud la
que debiera tomar sus propias decisiones, aprender a diferenciar lo
que es bueno y lo que es malo para ella, decir sin miedo a los
'mandamases' del mundo: “NO, miren, eso NO lo queremos para
nosotr@s, eso NO nos vale”. Que nadie le venga a la juventud a
venderle la moto como si fuese bicicleta... (Marin El Punki - Perro
Loko.)