Un estudiante universitario estuvo enseñándole su nuevo alojamiento a unos amigos... Mientras les mostraba con orgullo las habitaciones del piso, el estudiante abrió la puerta de un cuarto y sus amigos vieron un gran "Gong" de metal y un martillo bastante pesado.

Ante la sorpresa, uno de los amigos preguntó al estudiante: qué era aquello. Entonces el estudiante contestó:
- "¡Oh! Eso es un reloj que habla."
- "¿Y funciona?.".- Preguntó el amigo.
- "¡Oh!, ya lo creo..."
Entonces, el estudiante procedió a levantar el gran martillo y dar un golpe al gran "Gong" de metal, cuyo estruendo les dejó medio sordos. Al ratito, alguien gritó desde el otro lado de la pared:
- "¡¡¡YA BASTA, IDIOTA, QUE SON LAS DOS DE LA NOCHEEE!!!.